RESEÑA: No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas

Título: No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas
Autora: Laura Norton
Editorial: Espasa
Número de páginas: 352
ISBN: 978-84-670-4158-3
Año de publicación: Abril del 2014
Precio: 19,90 €

Gracias a la editorial Espasa por el envío del ejemplar :)

Si estás leyendo estas líneas  es que te ha llamado la atención el título. 
¿Te gustaría decírselo a alguien?
¿Serías capaz de decírtelo a ti mismo?
Y lo más importante:
¿Te gustaría mantener durante un buen rato la sonrisa que se te ha quedado en la cara?
Pues esta es tu novela.
Te podríamos contar con más o menos gracia de qué va la cosa,  para que te hicieras una idea: que si la protagonista, Sara, es muy  maja, que si tiene un trabajo muy interesante (es plumista, ¿a que nunca lo habías oído?), que si es un pelín obsesiva y alérgica a los sobresaltos...
Por supuesto, la vida se le complica y se encuentra con que  su piso se convierte en una especie de camarote de los  hermanos Marx cuando en la misma semana se meten a vivir con ella su padre deprimido, su hermana rebelde y  su excéntrico prometido y, sobre todo, el novio al que  lleva mucho tiempo sin ver...
Pero mejor no te lo contamos porque te gustará  leerlo. Lo único que necesitas saber es que, desde  el título, te garantizamos unas cuantas horas de  descacharrante diversión como hacía tiempo que no disfrutabas.

   ¿A quién no le ha entrado ganas de leer este libro simplemente leyendo su título? Es taaaan original que quise leerlo en cuanto lo vi, porque sabía que iba a ser un libro muy divertido. Leí unas cuantas reseñas que ponían el libro bastante bien, por lo cual, definitivamente, me animé a leerlo. Aún así, no iba con expectativas demasiado altas, lo que hizo que el libro me encantara.

   Lo más original del libro (aparte de su título jeje) es que Sara, la protagonista del libro, es plumista. ¡Sí, plumista! Un trabajo que le viene por su abuela, la cual se dedicaba a ello ¿Qué en qué se basa? Pues, básicamente, en utilizar plumas para hacer trajes, sombreros etc…, profesión que yo, sinceramente, no sabía ni que existía xD.

   Sara Escribano es una chica que vive en Malasaña, un barrio de Madrid, la cual decide estudiar la carrera de Química, pero se da cuenta que lo que verdaderamente le gusta es crear diseños con plumas, así que es lo que decide hacer. Se “muda” a casa de su ya fallecida abuela y pone en marcha el taller que ella tenía allí. Pero no será tan sencillo como parece, ya que se topará con bastantes obstáculos por el camino y nada ocurrirá como ella esperaba. Pasará de estar sola en casa a tener a su padre, a su hermana Lu, a Aarón(novio de ésta y “conocido” de Sara), a Roberto (su novio) y a Erik (un amigo de éste), ¡vamos, que será una casa de locos totalmente!

   Con este panorama que os he presentado, os podéis imaginar el rumbo que tendrá la historia de este libro. Los personajes vivirán aventuras muy graciosas juntos y otras…no tanto, pero intentarán salir airosos y te desternillarás de risa con ellos.

   Todos los personajes tienen una personalidad que los hace especiales. Sara es una chica tímida e insegura, pero eso solo al principio, ya que va evolucionando a lo largo de la novela; su hermana, Lu, es todo lo contrario a ella. Es una chica que llama la atención allá por donde va, es modelo y se enamora (y desenamora xD) muy fácilmente. Me encantó su naturalidad, su sinceridad, su rebeldía y sus frases tan irónicas. Me reí mucho con ella, aunque la mayoría de las veces no la entendía en ciertas cosas que hacía o que sentía; Aarón me llamó la atención desde el principio, me pareció un chico maravilloso, dispuesto siempre a ayudar a Sara, y aunque tuviera esa imagen de chulo sabía que no me iba a fallar (yo me entiendo jeje); Roberto, el novio de Sara, me cayó super bien al principio, pero poco a poco me fue decepcionando (cuando lo leáis, seguramente me podáis entender XD). Eric, su amigo extranjero, al que llamaban “el vikingo”, me gustó de principio a fin, ya que me pareció super tierno y muy gracioso.

   Otro punto a favor de esta novela, es que está contado en primera persona, desde el punto de vista de Sara, y eso es algo que a mí me encanta en los libros, ya que te hace conocer mejor a la protagonista y ver todos sus puntos de vista, lo que piensa y siente en cada momento.

   EN CONCLUSIÓN, es una lectura muy amena, que destaca principalmente por ese humor que te hace partirte de la risa con cada escena y cada conversación que mantienen los personajes. Un buen libro para despejarte y leer entre lecturas bastante densas.

¿Habéis leído este libro? ¿Qué os parece?